
Los centros de seguridad (SOC) se enfrentan hoy con volúmenes de alerta sin precedentes y amenazas cada vez más sofisticadas. La clasificación y el estudio de estas alertas son caras, pesadas y aumentan la fatiga, el agotamiento profesional y el desgaste de los analistas. Si bien la inteligencia artificial se ha convertido en una solución esencial, el término “IA” a menudo difumina las distinciones cruciales. Toda la IA no se construye igual, especialmente en el SOC. Mucho
