Un grupo bipartidista de senadores estadounidenses ha propuesto la Protección del Origen y la Integridad del Contenido Editado y Ley de Medios Deepfake (COPIADO), en una acción histórica para contrarrestar el creciente uso de deepfakes de inteligencia artificial (IA).
Bajo la dirección de los senadores Maria Cantwell (D-WA), Marsha Blackburn (R-TN) y Martin Heinrich (D-NM), esta propuesta de ley busca crear enfoques consistentes para marcar con marcas de agua el material generado por IA, proporcionando así una fuerte defensa de la autenticidad digital.
Deepfake: un impulso a la transparencia en la era digital
Al exigir que los proveedores de servicios de inteligencia artificial (incluidos gigantes como OpenAI) incorporen información de origen legible por máquina en el material que producen, la Ley COPIED está preparada para transformar el terreno digital y de las criptomonedas.
Esta medida, según Cantwell, es esencial para la “transparencia muy necesaria” y garantiza que los creadores conserven la propiedad de su trabajo incluso cuando la inteligencia artificial avanza para dominar la industria.
Al igual que muchos otros, Blackburn ha expresado la necesidad crítica de proteger al público de los peligros que plantea falsificaciones profundas.
“La inteligencia artificial ha dado a los malos actores el poder de hacer deepfakes de cada individuo, incluso de aquellos en la comunidad creativa, para copiar su imagen sin su conocimiento y sacar provecho del contenido falsificado”. Quemadura negra La legislación propuesta pretende desalentar este comportamiento inmoral al dificultar la explotación de ese material sin que se descubra su existencia.

La FTC implementará pautas estrictas
El mecanismo de ejecución de la Ley COPIADA es fundamental y pone a cargo de ello a la Comisión Federal de Comercio (FTC). Como todas las infracciones contempladas en la Ley de la FTC, la FTC será la encargada de supervisar el cumplimiento y de tratar las infracciones como actividades desleales o engañosas.
La aprobación de esta normativa llega en un momento en el que los debates sobre las implicaciones morales de la inteligencia artificial están cada vez más extendidos.
Un claro indicio de lo preocupada que está la gente por la capacidad de la tecnología para recopilar enormes cantidades de datos de Internet es el hecho de que Microsoft renunció a su puesto en la junta directiva de OpenAI.
Reacción de la industria y visión de futuro
Aunque los sectores digital y creativo han mostrado opiniones conflictivas sobre la Ley COPIADA, muchas partes interesadas ven la necesidad de tales reglas.
Al enfatizar la importancia de tomar medidas preventivas exhaustivas, Michael Marcotte, el fundador del Centro Nacional de Seguridad Cibernética (NCC), ha sido un fuerte crítico de corporaciones de Internet como Google por no actuar lo suficiente para detener los fraudes deepfake.
Imagen destacada de Dataconomy, gráfico de TradingView