La decisión coincide con el endurecimiento de los reguladores de EE. UU. sobre las criptomonedas en la economía más grande del mundo, una campaña que afectó a Gemini. En enero, la compañía y Genesis (que, al igual que CoinDesk, es propiedad de Digital Currency Group) fueron acusadas por la Comisión de Bolsa y Valores de vender valores no registrados.