¿Qué pasa si los puntos recopilados en diferentes marcas podrían convertirse en una forma de dinero? Los programas de fidelización están a punto de redefinir la forma en que las personas pagan, ahorran e interactúan con las empresas, evolucionando con descuentos u ventajas ocasionales a su propia moneda. Pero para que se produzca esta transformación, la industria debe superar los obstáculos que conservan los puntos durante años: accesibilidad y personalización.
El potencial de puntos sin explotar
Los puntos de lealtad están en todas partes, pero no satisfacen las necesidades de los consumidores. A finales de 2025, se estima
50% Las recompensas no se utilizarán. Para muchos titulares de tarjetas, los puntos son más como congestión que en el dinero, la recolección de polvo digital. ¿Para qué? La redención sigue siendo frustrante. Los programas a menudo limitan los ecosistemas limitados que restringen su uso a un puñado de minoristas a gran escala, dejando a los pequeños comerciantes fuera de la ecuación.
No es solo una pérdida para los clientes, es una oportunidad perdida para que los transmisores retengan y ganen el estatus de alto gas. Para que los puntos se conviertan en una moneda viable, deben ser fáciles de ganar y tan simples de gastar. Además, los puntos no utilizados crean responsabilidad por los libros para los emisores, enfatizando la necesidad de un enfoque más inteligente.
Incluso los programas de pago con puntos diseñados para dar a los clientes más flexibilidad tuvieron problemas para ganar terreno. Estos sistemas dependen en gran medida de las integraciones costosas de punto de venta (POS) que crean barreras para los titulares de tarjetas y los comerciantes.
Barreras de ruptura: ¿Qué retiene el pago con puntos?
Para que los puntos tengan éxito en la moneda, se deben tratar dos obstáculos: accesibilidad y personalización.
1. Accesibilidad
Uno de los mayores obstáculos para la adopción generalizada de los puntos es la integración del POS.
Requiere inversiones significativas por parte de los comerciantes y el mantenimiento continuo, excluyendo muchas empresas medianas o más pequeñas del ecosistema de fidelización. Esto lleva a opciones de compra limitadas, lo que significa que los puntos pierden valor en los consumidores.
Un sistema POS independiente ofrece una solución simple. Imagine realizar una compra, luego recibir una oferta de SMS o correo electrónico para intercambiar puntos por esta transacción. Con un grifo, se aplica crédito en tiempo real, sin retrasos, sin fricción del mercado. Este enfoque permite a los comerciantes de todos los tamaños participar, ampliar las opciones para los titulares de tarjetas y reducir los costos para los emisores.
2. Personalización
Los premios genéricos ya no cumplen con las expectativas del consumidor. Hoy,
71% Los consumidores esperan que las empresas proporcionen interacciones personalizadas, pero muchos proveedores de lealtad se retrasan. Los consumidores desean ofertas adaptadas a sus preferencias, sus hábitos de gasto y su historial de transacciones. A
Estudio BCG 2024 han descubierto que las tres ventajas principales de personalización son el valor, el placer y la conveniencia.
La clave para la personalización radica en los datos. No hay dos titulares de tarjetas idénticos, por lo que sus recompensas no deberían serlo. Por ejemplo, un graduado reciente con un límite de crédito más bajo y un alto empleado debe recibir diferentes ofertas dependiendo de sus modelos de gastos. Los emisores deben crear ofertas de compra únicas analizando su comportamiento y sus hábitos de titular de tarjetas.
Las recompensas personalizadas van más allá de la conveniencia: son transformadores en el programa de puntos. Cuanto mayor sea la oferta, más probable es estimular el compromiso y la lealtad. Cuando los puntos se sienten preciosos y personales, los titulares de tarjetas tienen más probabilidades de usarlos.
Bien hecho, la personalización ofrece ventajas clave en todas las áreas:
- Motivar el compromiso: Las ofertas personalizadas fomentan un uso más frecuente.
- Lealtad: Una recompensa bien emitida promueve una relación más fuerte entre los titulares de tarjetas y los emisores.
- Maximiza el valor: Las promociones específicas garantizan el máximo retorno de la inversión para los emisores al tiempo que mejora la experiencia del titular de la tarjeta.
Una visión para el futuro: puntos como dinero
La industria de la lealtad está en un momento crucial. Al igual que las recompensas de las tarjetas de débito transformadas en una caja registradora, un modelo de pago con puntos puede cambiar la forma en que gastan los consumidores, cómo los emisores compiten y la forma en que los comerciantes participan en la economía de lealtad. Así es como se ve este futuro:
- Los puntos competirán con dinero en gastos diarios: Los consumidores tendrán una mayor flexibilidad porque los puntos serán tan prácticos y versátiles como el dinero.
- Un modelo de remuneración sin problemas con los transmisores distinguirá: Aquellos que se adaptan fomentan un mayor compromiso con el programa, ayudándoles a ganar este estado codiciado de alto nivel.
- Los pequeños comerciantes finalmente se beneficiarán de ello: La eliminación de la barrera POS creará nuevas oportunidades sin costos excesivos.
La resurrección de los puntos de lealtad está en marcha. Con buena tecnología, estos premios pueden convertirse en una moneda real personalizada y accesible. Un estudio de 2024 realizado por McKinsey reveló que
76% Los consumidores se sienten frustrados cuando los programas de fidelización no ofrecen opciones de compra perfecta y real. Responder a esta demanda podría transformar fundamentalmente cómo los consumidores y los comerciantes ven los premios.
Los programas de fidelización están en una encrucijada. Las marcas que actúan decisivamente, que ofrecen soluciones de tiempo real, adoptan personalización y descomponen las barreras de accesibilidad, redefinirán la industria. No es una cuestión de seguir; Se trata de definir un nuevo estándar en el que los premios tienen el mismo poder y la misma versatilidad que la moneda.
