La IA generativa cambia la forma en que las empresas trabajan, aprenden e innovan. Pero debajo de la superficie, sucede algo peligroso. Los agentes de IA y los flujos de trabajo de Genai personalizados crean nuevas formas ocultas para que huyan los datos corporativos confidenciales, y la mayoría de los equipos ni siquiera se dan cuenta. Si construye, implementa o administra sistemas AI, ahora es el momento de preguntar: ¿sus agentes de IA presentan datos confidenciales