En el panorama siempre cambiante de la industria bancaria, la presión para mantenerse a la vanguardia de los avances tecnológicos y al mismo tiempo mantener servicios sólidos y seguros es un desafío constante. Un aspecto importante de esta evolución es la revisión de las plataformas existentes. A medida que los bancos se adaptan a los requisitos modernos, como mejorar las experiencias de los usuarios digitales, agilizar el procesamiento y adaptarse al cumplimiento normativo en evolución, se vuelve imperativo comprender la transformación de las plataformas existentes. Esta comprensión es crucial para integrar nuevas tecnologías y mantener la competitividad.
Las plataformas bancarias heredadas comprenden principalmente software o sistemas obsoletos que, aunque alguna vez fueron de última generación, ahora obstaculizan el avance tecnológico debido a sus limitaciones en compatibilidad, eficiencia, escalabilidad y seguridad. Los ejemplos comunes incluyen versiones anteriores de flujos de trabajo bancarios o soluciones de automatización, CRM heredados o sistemas de procesamiento de transacciones desarrollados antes de la era de la computación en la nube. Estos sistemas a menudo persisten porque respaldan operaciones críticas, contienen datos valiosos que no son fácilmente transferibles o simplemente no existe un argumento comercial lo suficientemente sólido como para justificar un cambio.
Afronta los desafíos
A pesar del contexto más amplio de necesidad y adaptación, está claro que el proceso de transformación de los sistemas bancarios existentes tiene sus desafíos. Estos sistemas están profundamente arraigados en la arquitectura de una organización, con numerosas dependencias que pueden hacer que desentrañarlos sea una tarea compleja y arriesgada. A menudo tienen documentación deficiente o nula y son muy personalizados. La dependencia de estos sistemas obsoletos significa que incluso los pequeños cambios pueden tener consecuencias impredecibles. Esto complica y aumenta los costos de las pruebas e incluso genera aversión al cambio. Esto ciertamente reduce el ritmo y la capacidad de cambio.
Mantener estas plataformas también puede ser costoso y requerir mucha mano de obra, ya que la experiencia en tecnologías obsoletas disminuye con el tiempo. Encontrar y retener talentos familiarizados con sistemas más antiguos puede resultar difícil, lo que genera mayores costos de capacitación y gestión de personal. Además, los sistemas más antiguos suelen tener dificultades para cumplir con los nuevos requisitos normativos, lo que aumenta el riesgo de infracciones y sanciones. Esto conduce a soluciones manuales o a varios sistemas parcheados de manera ineficaz. Esto puede dejar a las instituciones vulnerables a riesgos de seguridad y problemas de cumplimiento, lo que puede generar multas elevadas y daños a su reputación.
La ventaja de la transformación
A pesar de los desafíos, los beneficios de modernizar las plataformas existentes son innegables. Y hoy, la tecnología para respaldar el cambio ha mejorado significativamente, con la capacidad de utilizar GenAI y herramientas de automatización para acelerar la documentación y la transición de los sistemas existentes. Los sistemas actualizados claramente brindan una oportunidad importante para mejorar la eficiencia operativa a través de una mayor automatización y mejores velocidades de procesamiento de datos. La automatización puede reducir la carga de trabajo manual, minimizar los errores humanos y ayudar a mejorar los niveles de servicio para los clientes. Las velocidades de procesamiento de datos mejoradas facilitan un acceso y un análisis más rápido de datos críticos, lo que permite a los bancos responder más rápidamente a los cambios del mercado y las necesidades de los clientes. Quizás el mayor impacto sea poder introducir este cambio más rápidamente, con mayor certeza de mejores resultados para los clientes y el personal. La mayoría de los bancos con infraestructura modernizada hablan de la posibilidad de introducir cambios en cualquier momento de la semana, sin limitarse a los cambios de fin de semana fuera del horario comercial.
Estas transformaciones también mejoran la experiencia del cliente al facilitar interacciones más fluidas a través de canales digitales, que es lo que esperan los clientes de hoy. Esto es prácticamente algo que está en juego en el sector minorista y se está convirtiendo en una demanda similar en la banca corporativa. También ofrecen características únicas como asesoramiento financiero personalizado, actualizaciones en tiempo real y atención al cliente integrada. Al brindar estos servicios mejorados, los bancos pueden aumentar la satisfacción y la lealtad del cliente, que son clave para la diferenciación competitiva en la industria.
Además, las nuevas plataformas ofrecen funciones de seguridad y capacidades de cumplimiento mejoradas. Los sistemas modernos incorporan protocolos de seguridad avanzados y métodos de cifrado que protegen los datos confidenciales y evitan el acceso no autorizado. Las funciones de cumplimiento están integradas en estas plataformas para cumplir automáticamente con los requisitos reglamentarios más recientes, lo que reduce el riesgo de multas y al mismo tiempo mejora la confiabilidad y la confiabilidad de la institución.
Por último, también ofrecen mejores capacidades de análisis de datos, lo que permite a los bancos obtener información sobre el comportamiento de los clientes, mejorando así la toma de decisiones y la personalización de los servicios. Con potentes herramientas de análisis, los bancos pueden analizar grandes cantidades de datos para identificar tendencias, predecir las necesidades de los clientes, adaptar productos y optimizar las estrategias de precios.
Entonces, si se juntan todos estos elementos, el caso de negocio puede resultar muy convincente. Y lo que a menudo ha frenado a los bancos en el pasado (la aversión al riesgo de cambiar, el esfuerzo de documentar y comprender códigos y configuraciones de décadas de antigüedad) ahora se puede resolver mucho más rápidamente con las nuevas capacidades GenAI y la automatización.
El camino a seguir: reinvención, no sólo sustitución
Habiendo resaltado los importantes beneficios de modernizar las plataformas existentes, queda claro que el camino a seguir para los bancos implica mucho más que simplemente el reemplazo de tecnología. Se trata de una reinvención completa de las operaciones bancarias y de los servicios al cliente.
El viaje de transformación no sólo requiere actualizar el software antiguo por otro nuevo; requiere reimaginar cómo la tecnología puede mejorar e innovar fundamentalmente la banca y el servicio al cliente. Aquí es donde entran en juego métodos como el descubrimiento de procesos impulsado por la IA, que proporciona un plan de transformación que no consiste solo en la actualización de la tecnología sino también en la reingeniería estratégica del negocio. Se puede crear un diseño en minutos y horas en lugar de semanas y meses.
El uso de la IA, por ejemplo, para analizar y comprender las profundidades de los sistemas existentes ayuda a desarrollar caminos a seguir menos disruptivos y más beneficiosos. La IA puede desentrañar la lógica incorporada en los sistemas heredados, garantizando que la funcionalidad crítica no sólo se conserve sino que se mejore. La experiencia humana todavía entra en juego, pero de una manera más centrada y eficiente, y gran parte del trabajo pesado de definir procesos y pasos ya está hecho. Esto deja la función de revisión y mejora a cargo de un experto del banco.
Mirando al futuro: anticipando nuevos horizontes
De cara al futuro, la trayectoria de la tecnología bancaria apunta hacia soluciones nativas de la nube cada vez más ágiles que pueden adaptarse rápidamente a las dinámicas cambiantes del mercado y a las necesidades de los clientes. Los bancos que gestionen con éxito el proceso de transformación existente se encontrarán mejor posicionados para adoptar tecnologías emergentes y posicionarse como líderes en innovación.
Transformar las plataformas bancarias tradicionales no es una opción, sino más bien una necesidad en la era digital actual. El viaje requiere una planificación cuidadosa, la adopción de nuevas tecnologías como la IA para obtener conocimientos más profundos y mejorar los procesos, y una visión hacia la transformación empresarial total. Para los líderes de la industria bancaria, el mensaje es claro: aprenda de sus entornos existentes para construir una base que satisfaga las necesidades actuales e impulse el crecimiento y la innovación futuros.
