La automatización siempre ha sido un catalizador del cambio y su impacto se siente en todas las industrias, desde la logística hasta las finanzas. Amazon es un gran ejemplo: al aprovechar la automatización robótica, la empresa está reinventando la forma en que se entregan los productos, estableciendo nuevos estándares en eficiencia y satisfacción del cliente. Entonces, ¿qué puede aprender la industria de pagos mientras atraviesa una transformación similar?
Transforme las operaciones de back-end
En el corazón de cada sistema de pago hay una red compleja de operaciones de back-end que tradicionalmente dependían en gran medida de la intervención manual. La automatización cambia las reglas del juego al introducir eficiencia y confiabilidad sin precedentes en una variedad de tareas.
Por ejemplo, conciliar transacciones en múltiples sistemas es una tarea crítica pero que requiere mucho tiempo para los proveedores de pagos, pero las herramientas de conciliación automatizadas pueden analizar grandes cantidades de datos en minutos, identificar discrepancias y generar informes altamente precisos.
Asimismo, los errores de pago, como cargos duplicados o transacciones fallidas, son una fuente de frustración para los clientes. La automatización permite la detección y resolución de errores en tiempo real, lo que garantiza una interrupción mínima para los usuarios.
El cumplimiento normativo es la piedra angular de la industria de pagos, pero mantenerse al día con las regulaciones cambiantes es difícil. Los sistemas de cumplimiento automatizados utilizan algoritmos basados en reglas para monitorear el cumplimiento de las transacciones, lo que reduce el riesgo de violaciones regulatorias y al mismo tiempo libera recursos para otras prioridades.
Pero quizás la función más valiosa de la automatización de pagos, que resulta enormemente beneficiosa tanto para los comerciantes como para los consumidores, es la prevención del fraude.
Una nueva frontera en la prevención del fraude
El Banco Central Europeo (BCE) y la Autoridad Bancaria Europea (EBA) publicaron recientemente un Informe conjunto sobre el fraude en los pagos. Reveló que el valor total de transferencias fraudulentas, débitos directos, pagos con tarjeta, pagos con tarjeta, retiros de efectivo y transacciones de dinero electrónico en el EEE alcanzó los 4.300 millones de euros en 2022, con 2.000 millones de euros adicionales reportados en el primer semestre de 2023.
La prevención del fraude es una batalla constante para la industria de pagos, donde los actores maliciosos se vuelven cada vez más sofisticados. Pero la automatización de la IA cambia las reglas del juego, ya que los sistemas de detección de fraude basados en IA transforman la forma en que los proveedores de pagos identifican y responden a las amenazas.
Los sistemas de IA no solo destacan en el análisis de patrones en datos de transacciones, sino que, a diferencia de los sistemas tradicionales basados en reglas, los modelos de IA pueden adaptarse a nuevas amenazas. Al aprender continuamente de los datos, perfeccionan sus capacidades de detección y se mantienen un paso por delante de los estafadores.
La IA también mejora la autenticación del usuario, lo que dificulta el acceso de usuarios no autorizados. Los sistemas de autenticación biométrica, por ejemplo, combinan la IA con tecnologías como el reconocimiento facial para verificar las identidades de forma más segura.
La capacidad de responder a las amenazas con precisión y rapidez no solo mitiga el riesgo, sino que también genera confianza en el cliente, un activo fundamental en la industria de pagos. Todo esto no quiere decir que la transición hacia un futuro automatizado estará exenta de desafíos.
Retos e implementación responsable
Si bien los beneficios de la automatización de pagos son innegables, los proveedores de pagos deben abordar las cuestiones relacionadas con la privacidad y la seguridad de los datos. La automatización depende de grandes cantidades de datos confidenciales, por lo que es esencial contar con medidas de seguridad sólidas. Las empresas deben invertir en cifrado, API seguras y auditorías periódicas para proteger la información de los clientes.
Además, a medida que la automatización reduce la necesidad de intervención humana, las empresas deben considerar su impacto en el empleo y garantizar que los trabajadores desplazados reciban apoyo a través de iniciativas de recapacitación.
Para aprovechar la automatización de manera responsable, los proveedores de pagos deben adoptar un enfoque gradual, comenzando con proyectos piloto para validar la tecnología antes de ampliarla. La colaboración con las partes interesadas, incluidos los reguladores y los clientes, también es esencial para garantizar la alineación con los estándares y expectativas de la industria.
Mirando hacia el futuro
Creo que la automatización inteligente redefinirá lo que es posible en materia de pagos.
A medida que la demanda de pagos instantáneos continúa creciendo, la automatización será clave para satisfacer esta necesidad al eliminar los procesos manuales y facilitar transacciones fluidas y en tiempo real, ya sean pagos entre pares o desembolsos profesionales.
La automatización es más que una simple herramienta para mejorar la eficiencia: es una herramienta estratégica para la industria de pagos, que desbloquea nuevos niveles de rendimiento, seguridad y satisfacción del cliente. Ya sea para optimizar las operaciones de back-end, revolucionar la detección de fraude o allanar el camino para los pagos en tiempo real, la automatización está dando forma al futuro de nuestras transacciones.
A medida que los proveedores de pagos adoptan la automatización, ahora deben priorizar la seguridad, la transparencia y las prácticas éticas para garantizar que estas tecnologías beneficien a todos los involucrados.
Al abordar estos desafíos de manera cuidadosa, la industria de pagos puede aprovechar al máximo la automatización para crear un ecosistema más dinámico y resiliente; uno que satisfaga las demandas de un mundo digital en rápida evolución.