1. Introducción
La inflación es una preocupación persistente para muchos ahorros, y Gambia no es una excepción. El Banco Central de Gambia (CBG) utilizó varias medidas, incluidos los ajustes de tasas de interés, para ralentizar las presiones inflacionarias. Sin embargo, a pesar de estos esfuerzos, la inflación sigue siendo tercamente alta. La pregunta crítica es: ¿por qué? Si no tenemos este problema fundamental, corremos el riesgo de buscar respuestas en el lugar equivocado.
La respuesta radica en la naturaleza de la inflación en Gambia, que es más estructural que monetaria. A diferencia de los ahorros avanzados donde la inflación a menudo está motivada por una oferta de dinero excesiva, la inflación de la gambia se basa en deficiencias estructurales más profundas. En consecuencia, las herramientas de política monetaria y los aumentos de tasas de interés son en gran medida ineficaces para resolver el problema.
Milton Friedman dijo que “la inflación es siempre y en todas partes un fenómeno monetario”. Su argumento sugiere que la inflación está motivada principalmente por un crecimiento excesivo en la oferta monetaria. Aunque esto se debe en muchos ahorros avanzados con mecanismos de transmisión monetarios fuertes, la dinámica de la inflación de la Gambia pone en duda esta afirmación. En Gambia, la inflación es más estructural que monetaria, lo que significa que las herramientas de política monetaria, como los aumentos de las tasas de interés, son en gran medida ineficaces para abordar las causas profundas.
2. Prueba de tendencias en política monetaria
Las Figuras 1 y 2 que lo acompañaron, que representan la oferta monetaria (M2), la inflación, la tasa de política monetaria (MPR) y la tasa de facturas de efectivo de 3 meses, también respalda el argumento de que la inflación en Gambia es estructural en lugar de monetaria.
Fuente: CBG, almacén de datos macroeconómicos
Figura 1: tasa de inflación monetaria e inflación
Figura 2: Tasa de política monetaria, 3 meses
2.1 Las observaciones clave del gráfico incluyen:
- La inflación y la oferta monetaria han mostrado tendencias divergentes, la inflación continúa aumentando incluso durante episodios de bajo crecimiento monetario. Esto sugiere que la inflación en Gambia está motivada por factores distintos de la oferta monetaria.
- Las tendencias de inflación tienden a aumentar incluso cuando el MPR permanece relativamente alto, lo que sugiere que los factores externos y el lado del suministro, en lugar de las condiciones de liquidez interna, causan aumentos de precios.
- El desacoplamiento de la inflación de las señales de la política monetaria refuerza el argumento de que las reformas estructurales son necesarias para combatir las presiones inflacionarias persistentes.
- A pesar de las fluctuaciones significativas en los niveles de MPR y las cajas en forma de t, la inflación no responde proporcionalmente, lo que indica que los ajustes de la tasa de interés tienen un impacto limitado en la estabilidad de los precios.
- Los niveles de t-bill no responden de manera efectiva a los cambios de MPR en la Figura 2, lo que sugiere mecanismos de transmisión monetarios bajos. La ausencia de sincronización entre MPR y los rendimientos del Tesoro resalta la ineficacia del sistema financiero, lo que limita la efectividad de la política de tasas de interés para controlar la inflación.
3. Prueba basada en la estructura de la economía
- Naturaleza dependiendo de la importación de la economía
Gambia depende de las importaciones de productos esenciales, incluidos alimentos, combustible y materias primas. Esta dependencia significa que las perturbaciones mundiales de la cadena de suministro, las fluctuaciones del tipo de cambio y los choques de precios externos tienen un impacto directo en los precios interiores. Cuando aumentan los precios mundiales del combustible o cuando el Dalasi se deprecia las principales monedas, aumenta el costo de las importaciones, lo que resulta en una mayor inflación. Ningún monto de ajuste de tasa de interés puede resolver este problema fundamental.
La agricultura, que es una parte importante de la economía gambiana, sufre de baja productividad debido a una infraestructura inadecuada, técnicas agrícolas y vulnerabilidad al shock climático. La capacidad limitada de producción interior obliga al país a contar con las importaciones, lo que hace que los precios sean sensibles a las influencias externas. Sin abordar estas limitaciones estructurales, la inflación continuará persistiendo, independientemente de las intervenciones políticas monetarias.
El Gambia opera bajo una tasa de tipo de cambio flexible, lo que hace que Dalasi sea muy sensible a los choques externos. Dado que se importa una gran parte de los bienes de consumo del país, cualquier depreciación del Dalasi se traduce inmediatamente a precios más altos (transferencia). Aunque el aumento en las tasas de interés puede ayudar a estabilizar la moneda hasta cierto punto, no hace mucho abordar las causas profundas de las fluctuaciones del tipo de cambio, como los desequilibrios comerciales y las reservas de bajo cambio.
- Rigididades estructurales en el mercado laboral
El mercado laboral gambiano se caracteriza por un gran sector informal y una baja productividad, que contribuye a los salarios estancados y a la reducción del poder adquisitivo. Esto crea una brecha a precios salariales en lugar de una espiral a precios salariales, lo que significa que la inflación no está motivada principalmente por el aumento de los salarios, sino por los choques de precios externos (por ejemplo, el aumento de los costos de importación). Abordar la ineficacia del mercado laboral requiere soluciones políticas a largo plazo en lugar de intervenciones monetarias a corto plazo.
- Desafíos de la cadena de suministro y logística
La infraestructura mediocre y la logística ineficaz contribuyen considerablemente a la alta inflación. El costo de transportar bienes en el país sigue siendo alto debido a las malas redes de carreteras y los altos costos de combustible. Además, la pérdida de competitividad del puerto de Banjul en Senegal exacerbó las perturbaciones de la cadena de suministro. La mayoría de los bienes ahora se importan a través de Senegal, luego transportados en Gambia, las empresas se enfrentan a mayores costos logísticos, ineficaces aduaneras y retrasos, que hinchan todos los precios del consumidor. Estas ineficaces estructurales crean cuellos de botella que aumentan los costos en la economía. El retorno a estos desafíos requiere inversiones estratégicas en infraestructura y medidas de facilitación comercial en lugar de depender únicamente de los aumentos de las tasas de interés.
3. Un enfoque más efectivo: reformas estructurales
Dada la naturaleza estructural de la inflación en Gambia, las soluciones políticas deben ir más allá de las medidas monetarias. Las siguientes reformas estructurales podrían proporcionar una ruta más sostenible a la estabilidad de los precios:
- Diversificación de la economía: La inversión en agricultura y fabricación puede reducir la dependencia de las importaciones y mitigar los choques de precios externos.
- Mejora de la producción interior: Mejorar la productividad en los sectores clave ayudará a estabilizar los precios al reducir la necesidad de importaciones.
- Fortalecer la estabilidad del tipo de cambio: Las políticas destinadas a estimular las exportaciones y atraer inversiones extranjeras pueden ayudar a construir reservas de intercambio y estabilizar el Dalasi.
- Mejora de la infraestructura: Las mejores redes de transporte, el suministro de energía y la logística reducirán los costos de producción y distribución, reduciendo así las presiones inflacionarias.
- Estrategias de adaptación climática: Dado que el Gambia es vulnerable a los choques climáticos, invertir en la agricultura y la gestión de los resilientes en el clima puede ayudar a estabilizar el suministro y los precios de los alimentos.
4. Conclusión
La inflación en Gambia está profundamente arraigada en deficiencias estructurales, lo que hace que las herramientas de política monetaria como los aumentos de tasas de interés insuficientes para la estabilidad a largo plazo de los precios. La evidencia de las tendencias históricas en la política monetaria muestra que la inflación sigue siendo alta a pesar de los cambios significativos en las tasas de interés. Además, la baja respuesta de los niveles de factura T a los ajustes de MPR sugiere ineficacia en el sistema financiero, lo que reduce aún más la efectividad de la política monetaria. La lucha contra las causas reales de la inflación requiere reformas estructurales completas destinadas a mejorar la producción, mejorar la infraestructura y reducir la dependencia de la importación. Sin estos cambios, las presiones inflacionarias persistirán, independientemente de los ajustes de la tasa de interés.
Dada la naturaleza estructural de la inflación, el uso de la tasa de políticas como un gesto simbólico (estamos haciendo algo) es más lógico que contarlo como un instrumento para hornear. Por lo tanto, el CBG debe usar la política monetaria principalmente como una herramienta de señalización en lugar de un mecanismo de lucha de inflación directa.
